info Desde sardinas enteras crujientes hasta bacalao seco y salado, estos son los platillos para probar en Lisboa y en varias zonas de Portugal.
Peixinhos da horta
Aunque la cocina portuguesa es rica en carnes y mariscos, los peixinhos da horta son una receta vegetariana fundamental.
Los peixinhos da horta, que literalmente significan “pececitos de la huerta”, son solo eso: vegetales arrancados del suelo, empanados y fritos hasta que estén crujientes y dorados, lo que da como resultado un producto final que se asemeja a pequeños peces de colores.
La verdura tradicional son las judías verdes, pero la calabaza y los pimientos también se sustituyen en ocasiones.
En Portugal han elaborado este platillo durante siglos, e incluso lo introdujeron a los japoneses cuando los misioneros jesuitas desembarcaron en las orillas de Japón en el siglo XVI; este estilo de freír finalmente se transformó en la ahora amada tempura.
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Açorda
Típica comida campesina alentejana, la açorda se elabora con pan del día anterior y se tritura con ajo, trocitos de cilantro, aceite de oliva, vinagre y huevos escalfados.
El Alentejo es la región más grande de Portugal, una zona repleta de campos, granjas y viñedos.
Aquí, los lugareños son principalmente trabajadores agrícolas, que harían açorda debido a sus ingredientes baratos que podrían personalizarse con cualquier otra cosa que tuvieran a mano: cuanto más rica es la familia, más rica es la açorda.
A lo largo de la costa, se pueden agregar camarones y otros mariscos al platillo, mientras que en el interior, es más probable que los cocineros arrojen trozos de caza salvaje.
Sopa de cação
Proveniente de Alentejo, esta sopa verde brillante obtiene su color del cilantro, y es un caldo verde salpicado de ajo, trozos de cazón, limón, hojas de laurel, pimentón y vinagre.
La sopa se combina comúnmente con broa, un pan de Portugal molido con harina de maíz.
Feijoada
La feijoada, derivada de la palabra portuguesa feijão para frijoles, es un guiso de frijoles mezclado con carne de res y cerdo.
Tiene sentido que esta comida reconfortante que calma el alma se sirva durante los inviernos frescos y lluviosos de Portugal.
En la región rural de Trás-os-Montes, esto significa un guiso colorido de frijoles rojos y blancos salpicados con trozos de carne de cerdo (a veces incluyendo las orejas y el morro), salchichas y verduras ligeramente fritas y condimentadas con comino, clavo, ajo y pimentón.
Algunas versiones cocinadas cerca del agua sustituyen la carne por buccino (caracoles de mar).
Porco preto
El cerdo ibérico negro, criado con una dieta de bellotas, es un cerdo doméstico común endémico de las regiones central y sur de Portugal y España.
Estos cerdos criados en libertad, llamados porco preto en portugués, se encuentran como la estrella de una serie de platillos, incluido el jamón pata negra y las plumas de porco preto (chuletas de cerdo, generalmente servidas con ensalada y papas fritas).
