La historia del Cheesecake

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En este texto te invitamos a conocer la historia del Cheesecake, pero primero hay que saber qué son. Estos postres son natillas horneadas, un equilibrio relativamente simple de queso blando, huevos, azúcar y algunos condimentos, generalmente sobre una base de galleta o pastelería.

¿Verdad que se antoja un Cheesecake? Entonces, pídelo en servicio a domicilio. Es sorprendente la cantidad de personas alrededor del mundo que lo solicitan, sobre todo en los restaurantes, pero como muchos otros alimentos, tiene orígenes humildes.

La variedad del Cheesecake

Hay cuatro tipos básicos de Cheesecake, la variedad e incluso la marca de queso que afectan la textura y el sabor: cuajada, como queso de granja, de olla o requesón; ricotta (Cheesecake italiano); quark (Cheesecake alemán; y queso crema (Cheesecake de Nueva York).

Además, hay una versión de gasa sin hornear (pastel de queso francés).

La antigüedad y Edad Media

Los antiguos griegos, en el siglo V a. C., hicieron las primeras tartas de queso rudimentarias conocidas como “plakous” (significa “masa plana”), que consistían en empanadas de queso fresco machacadas con harina y miel y cocidas en una plancha de barro.

En la Europa medieval tardía, el Cheesecake resurgió con una base de pastelería. El primer libro de cocina inglés, The Forme of Cury (c. 1390), que consistía en una colección de recetas medievales inglesas compiladas por los cocineros del rey Ricardo II, incluía dos tartas de queso:

  1. Sambocade“, que contiene requesón, claras de huevo, agua de rosas y flores de saúco.
  2. Tart de Bry”(La palabra bry se deriva de Old Norman para “machacado”, refiriéndose al método de preparación del queso) hecho con un queso de vaca de otoño semi-suave, yemas de huevo y jengibre molido.

Durante los siguientes cinco siglos, casi todos los libros de cocina en inglés posteriores contenían al menos una receta de Cheesecake.

La historia del Cheesecake

De Europa hasta América

Teniendo en cuenta el perdurable amor de los ingleses por el Cheesecake, no es de extrañar encontrarlos en las colonias americanas. En la década de 1730, Filadelfia contaba con la taberna “Cheesecake House“.

El Booke of Cookery y Booke of Sweetmeats de Martha Washington (esposa del primer presidente de Estados Unidos, George Washington), muestra tres pasteles de queso y un “pudín de cuajada” horneado, el último era un pastel de queso sin corteza, aromatizado con agua de rosas, especias y grosellas, horneado en costras de hojaldre.

En el siglo XX, el limón y la vainilla más sutiles reemplazaron el agua de rosas y las especias como el aroma predominante del Cheesecake.

La base de muchas tartas de queso estadounidenses cambió drásticamente en la década de 1930 de requesón a una delicia mucho más cremosa y rica, debido al queso crema.

Si te gustó esta información, no te pierdas la segunda parte sobre la historia del Cheesecake.

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