info El debate sobre las tarjetas de crédito no cesa: usarlas o no usarlas, pero poca gente negará que usar una tarjeta de crédito de forma responsable es probablemente la forma más fácil de crear un historial crediticio sólido, además de recibir ciertas bonificaciones y promociones en créditos. Y a todo el mundo le vendría bien un buen historial crediticio.
Proteger sus compras en sus tarjetas
Supongamos que está a punto de comprar un artículo de gran valor, como un televisor, una lavadora o cualquier otro aparato o electrodoméstico caro. Es cierto que, en la mayoría de los casos, al comprar en efectivo obtendrá un recibo y una garantía limitada del fabricante de un año.
Sin embargo, ahí acaba su protección. Por regla general, la garantía del fabricante no cubrirá ningún electrodoméstico ni siquiera un día después de que expire la suya. Y cualquiera que conozca la Ley de Murphy sabe con qué frecuencia ocurren estas cosas.
Mantenga una sola tarjeta de crédito
Por muy tentador que sea tener una “red de seguridad” compuesta por varias tarjetas de crédito, a la larga podría causarle problemas. Por lo tanto, establezca como norma tener sólo una tarjeta de crédito con un límite manejable.
Esta regla no sólo mantendrá bajo control tus gastos, sino que también te permitirá controlar tus finanzas con eficacia.
Antes de comprometerte con una tarjeta de crédito, busca la que tenga los tipos de interés más bajos y las mejores ofertas.
Recuerde que debe pedir prestado lo que pueda devolver con sus tarjetas
Evite caer en la trampa de la deuda mordiendo más de lo que puede masticar. Y, si aún así quieres pedir prestado, no olvides comprobar los tipos de deuda que vas a tener. Recuerda que, aunque no pagues en efectivo una compra, tendrás que desembolsar dinero al cabo de un mes.
Una regla general sería limitarse a un tercio de tus ingresos en deudas. Esto incluye no sólo las tarjetas de crédito, sino también las hipotecas, los préstamos para coches y los préstamos estudiantiles.
